Bromhidrosis es el término que se le da al vulgarmente conocido «mal olor de axilas». Sin embargo, este problema va mucho más allá, ya que cuando una persona huele mal por la sudoración, la falta de higiene o un excesivo esfuerzo este olor, tiene solución. El sudor es la respuesta al estímulo que sufren las glándulas apocrinas por cualquier movimiento o reacción y cuya respuesta es la secreción de fluidos. Cuando estos fluidos se descomponen en la piel se produce el olor que, dependiendo de muchos factores podrá ser más o menos intenso.
Siempre que haya un caso de bromhidrosis puedes consultar con tu médico o farmacéutico para que te recomiende cuáles son los mejores remedios. No obstante, existen productos especializados para que las personas que tienen este problema lleven una vida completamente normal.
Una persona que tiene bromhidrosis no sufre falta de higiene y seguramente use desodorante para salir de casa e ir al trabajo no obstante, el mal olor de axilas sigue estando vigente y quien lo padece, preocupado por ello. Cuando hay un caso diagnosticado de estos lo mejor es que optemos por un tratamiento algo más estricto que nos valga para quitarnos en la medida de lo posible, el mal olor de las axilas.
Si usted padece bromhidrosis lo mejor es que consulte con su médico para que se le pueda administrar algún producto más fuerte para la piel. También es bueno que se haga un pequeño estudio con el dermatólogo para determinar el por qué usted está teniendo este problema y así, dar con una solución más rápida.
Estamos de acuerdo en que un problema de mal olor de axilas es bastante incómodo y puede llevar al agobio a aquella persona que lo tiene pero casi todos estos casos de la piel son tratables y no tiene por qué preocuparse pues de seguro, los especialistas darán con lo que necesita para que esto termine.